jueves, noviembre 02, 2006


"NO ES POR NUESTRO DOLOR, ES POR TU SILENCIO"
Esta fue la consigna que nos llevó el pasado lunes, 30 de octubre de 2006, a caminar desde Rubio hasta la Catedral de San Cristóbal. A la cita acudimos: familiares de los secuestrados, familiares de las víctimas del sicariato, familiares de las víctimas del retardo procesal y ciudadanos habitantes del Estado Táchira que nos sentimos amenazados por el simple hecho de vivir en él. La caminata comenzó a las 8 y 30 a.m. y terminó con una misa en la catedral a las 3 p.m.
Larga jornada, llena de emociones, de esperanza y de fé... emociones encontradas. Gracias familia Dávila, gracias Porfirio (hijo), por permitirnos compartir con ustedes sus miedos y los nuestros, sus esperanzas y las nuestras.
Porfirio (padre), espero que Dios pronto te regrese a casa. Ciudadanos venezolanos, esperemos que pronto llegue la libertad. La imagen es de la misa en la Catedral de San Cristóbal. En ella, el Padre dijo que nuestra obligación como venezolanos es defender nuestra Patria como sea.
¡DIOS NOS BENDICE A TODOS!